KFC. BRAYSFC
Resulta que a Brays Efe le encanta el pollo de KFC. Resulta que lo dijo a bombo y platillo en Instagram. Y, claro. Había que gestionar una respuesta rápida y en línea con el altar en el que él nos había puesto. Encima gratis. Así que más tontorrones nos pusimos.
Creamos un bucket personalizado con su cara y una tarjeta para que pudiera tener #pollopollo gratis siempre que se le antojara. Ah, y una gorra. Bolis es que no teníamos. Y se lo enviamos.
Por supuesto nos enteramos por Instagram de que le había llegado. Un niño chico con un juguete nuevo es poco para la ilusión que le hizo.
Y todo por exactamente por 10 euros, que los envíos cada vez están más caros y los sellos ni te cuento.


